Sin éxito culminó el proceso adelantado por el cantante Amín Martínez, quien buscaba resarcir la condena interpuesta por la Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín, que lo encontró culpable del delito de usurpación de derechos de propiedad industrial y derechos de obtentores de variedades vegetales.
La historia se remonta a 1981, Amín Martínez fue contratado como vocalista de ‘Los Embajadores del Vallenato’ y un año después la compañía Discos Fuentes aceptó su solicitud de formalizar ‘Los Chiches del Vallenato’. Grabó entonces el compacto ‘Enamorado del amor’, al lado de Andrés Guerrero.
‘Ceniza fría’, ‘Tierra mala’, Muchacha encantadora’, ‘Me tocó perderte’, ‘Fábula de amor’, todas estas fueron hechas con el respaldo de ‘Los Chiches del Vallenato’, agrupación de la que este hombre nacido en Chimichagua, Cesar, salió en malos términos.
En el año 2001 se retiró y comenzó una batalla jurídica para cantar las obras que en su voz tienen años de ser himnos en países de América Latina y Centroamérica. Pero algo más grave, utilizó la razón social ‘Los Chiches del Vallenato’, cuando no debía y así llegó su calvario.
La marca ‘Los Chiches del Vallenato’ pertenecieron a Amín, pero el 22 de abril del 2004 la cedió mediante un contrato a Discos Fuentes Edimusica S.A., que a su vez la traspasó a Osmar Oswaldo Pérez Moreno, quien adquirió su titularidad y derechos de explotación comercial como vocalista de esa agrupación.
Condenado, sancionado y casi desaparecido
Un grupo de abogados de Osmar Pérez, quien fue vocalista y líder de Los Chiches del Vallenato por más de 10 años, abrió un proceso jurídico ante las autoridades colombianas, incluyendo la Fiscalía General de la Nación, en contra de Amín Martínez.
Desde el 5 de junio de 2015, Amín Enrique Martínez Barreto cambió su nombre por Amín El Chiche Martínez Barreto ante la Registraduría Nacional del Estado Civil. La idea era abrir nuevos caminos en su vida musical, sin embargo, comenzó a promocionarse y suscribió contratos para realizar conciertos, entre esos uno ofrecido en Medellín para cantar en la Plaza de Toros La Macarena, el 31 de octubre de 2015, cuya venta de la boletería lo presentaba como Amín ‘El Chiche’ Vallenato.
Osmar Pérez interpuso una denuncia con resultados solo hasta el 5 de diciembre de 2016, cuando le imputaron cargos a Amín Martínez por usurpación de derechos de propiedad industrial.
Así el lío jurídico comenzó a pasearse por los estrados judiciales. Primero, el Juzgado 23 Penal del Circuito con Función de Conocimiento de Medellín dio vencedor a Amín Martínez, al ser declarado inocente tras finalizar el juicio, pero la decisión fue revocada, en segunda instancia, por la Sala Penal del Tribunal Superior de la capital de Antioquia.
El tema no quedó ahí, la defensa de Amín Martínez interpuso un recurso extraordinario de casación que fue resuelto por la Corte Suprema de Justicia, el pasado 3 de noviembre de 2021.
El supremo consideró que el cantante sabía que no podía usar esa expresión con fines comerciales porque era similar a la marca registrada y aun así la promocionó.
“Decidió, pese a la prohibición, seguirla utilizando con el propósito de ofrecer y vender los productos o servicios a que hacen relación las clases 9ª y 41 de la Clasificación Internacional de Niza que se refieren la distinción de «aparato para el registro de transmisión, reproducción del sonido o imágenes, soportes de registro magnéticos y discos acústicos» y «servicio de entretenimiento y actividades culturales», respectivamente”, advierte el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que conoció PRIMERA LÍNEA.
De esta manera y al no casar el fallo impugnado por la defensa de Martínez, la Sala de Casación Penal condenó a Amín El Chiche Martínez Barreto como autor del delito de usurpación de derechos de propiedad industrial y derechos de obtentores de variedades vegetales.
La decisión incluye el pago de 48 meses de prisión y multa de 26.66 salarios mínimos legales vigentes, así como la inhabilidad para ocupar cargos públicos.
En la actualidad, Los Chiches del Vallenato siguen en poder de Osmar Pérez, quien tiene dentro de la agrupación a Jesús Acuña y Neder ‘el Gringo’ Ramos, en el canto y acordeón, respectivamente.
Estos son Los Chiches del Vallenato
Fuente: Primera Linea