El artista cobraba entre 50 y 80 millones de pesos por presentación. Para los músicos de su conjunto, Martín Elías no solo era un buen jefe, sino amigo de todos. «Una persona muy cercana”, dicen. En la organización, 38 personas dependían del artista, entre los que interpretan los instrumentos, coristas, coordinador, auxiliares, mánager, community manager, gerente administrativa, contador, productores, ingenieros de sonido y de luces, secretaria, asistentes, presentador, equipo de seguridad y conductores.
«A pesar de ser tan amplia, la agrupación estaba bien estructurada, desde la cabeza hacia abajo”, indicó Brayan Cuadro, encargado de construir, gestionar y administrar la comunidad online alrededor de Martín Elías en internet.
La organización musical cobraba 50 millones de pesos por presentación en la Costa, y entre 70 y 80 millones en el interior del país. De estos derivaban los ingresos quienes hacen parte de la nómina. Cuadro señala que a los músicos se les pagaba de acuerdo con su responsabilidad en el grupo, el instrumento que interpretara y la trayectoria.
«Existían varias líneas en el organigrama. Los líderes eran Martín Elías y Rolando Ochoa, y seguía en el orden jerárquico Juan Carlos Vega, mánager general”, indicó.
Vega dio a conocer a El Heraldo el organigrama de la organización. «Los artistas, Martín Elías y Rolando Ochoa, estaban a la cabeza; luego venía yo como mánager general, y de ahí se desprendían dos líneas, una administrativa y la otra musical”, sostuvo.
En la coordinación administrativa estaba Jeny Rivero, esposa del asistente personal y amigo de Martín Elías, Rafael Rico; en ese orden de administración seguía el contador; en la organización también estaba el coordinador general, Julián Fragoso, le seguía el productor musical, Marlon Gutiérrez; el productor de escenario, Alfredo Stephanel; de aquí se ramificaban los ingenieros de sonido Carlos Barros y Yunis Peña; el ingeniero de luces, Farid Carrascal, los músicos, el personal de logística, seguridad y auxiliares.
De la dirección del mánager general también estaban las jefes de promoción: una en Bogotá, Paola España, y otra en la Costa, Marta López, y el community manager, Brayan Cuadro.
Entre los músicos «tenemos el cajero, conguero, timbalero, baterista y guacharaquero; tres coristas, un guitarrista, un bajista, un pianista; tres auxiliares, el presentador, un productor, los ingenieros de sonido y de luces que eran las personas que regularmente viajaban con Martín Elías”, sostuvo Brayan Cuadro..
«En la agrupación hay varios niveles de músicos, de acuerdo con el tiempo que llevaban con Martín, con el instrumento que tocaran, y a las responsabilidades dentro del grupo; había unos que no solo se dedicaban a tocar, sino que hacían de productor; tenemos por ejemplo en los coros a Erik Escobar, que es uno de los coristas más emblemáticos que tenemos en este género, cada quien tenía un salario distinto”, asegura. No obstante, aunque reconoce que el sueldo es importante para cualquier trabajador, para los integrantes de la organización, esto no era de gran interés.
Aparte de estos, señala que Martín Elías tenía otras personas que trabajaban para él, sin que viajaran. «Eran unas cinco o seis, que lo acompañaban en su diario vivir”, afirma.
El mánager Juan Carlos Vega confirmó que de la nómina también hacían parte la abuela de Martín Elías, Elvira Maestre ‘Mamá Vila’, y su mamá Patricia Acosta.
El baterista, Juan Manuel Cuello, indicó que «Martín Elías fue el mejor jefe que he tenido. Siempre estaba pendiente de todos”.
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Fuente: El Heraldo
